Como muestra de respeto, hicimos una reverencia hacia el altar de mis hermanos durante unos segundos, para luego dirigirnos hacia los cuarteles del Segundo Escuadrón. Mientras nos íbamos alejando del monte, no surgió ningún tipo de conversación entre nosotras. En su lugar, me asaltaban dudas constantemente. < ¿Cómo ha conseguido que sea tan sincera con ella, si apenas nos conocemos? ¿Y cómo fue capaz de encontrarme, si estaba en un lugar oculto por la maleza del bosque? > Todas estas preguntas hacían que me sintiera algo confusa, pero eso era algo que no importaba. En el fondo…sentía que podía confiar en ella. Sentía que ella era como un ángel de la guarda camuflado, que me protegía y me ayudaba desde las sombras. Al principio pensaba que ese ángel era Yoruichi, pero aquella experiencia me hizo darme cuenta que un ángel de la guarda era aquel que te da lo que necesitas, y no lo todo lo que quieras. Para entonces, yo había venerado a Yoruichi como si de una diosa se tratase, recibiendo únicamente algunos conocimientos sobre lucha, y una traición que supuso una herida difícil de curar.
Una vez que llegamos a los cuarteles de mi escuadrón, me encontré a un Omaeda preocupado, pero con esperanzas de que yo estuviera bien.
- ¡Capitana! ¿Dónde ha estado? Todos están buscándola ahora mismo- Preguntó con preocupación, dándome una curiosa bienvenida con aquella pregunta abrumadora.-
- ¡E-estoy bien! ¡No deberían estar buscándome! Me las sé apañar sola…-Dije tratando de recuperar mi tono habitual, pero sin ser demasiado brusca. El hecho de que se hubieran preocupado por mí me ablandó un poco el corazón, pero tampoco quise que me lo ablandara más de la cuenta.
Tras nuestra pequeña charla, Omaeda y yo nos dirigimos hacia los cuarteles. Antes de entrar, me giré levemente, y vi a una Rukia sonriente que se despedía de mí con dulzura. Con mi mano correspondí su despedida, y la observé mientras partía. Sin embargo, aquel instante no duró mucho, ya que rápidamente todo mi escuadrón se dirigió a mí con alegría, al ver que estaba bien.
Hoy hemos actuado de forma opuesta a como solemos ser…bueno, eso es lo de menos.
Comentario final:
¡No puedo creerme que por fin haya podido plasmar la historia que desde hace mucho tiempo tenía estructurada en mi cabeza *^* kyaaa! Espero que os haya gustado. ¡No olvidéis de comentar, eh ^^! Me gustaría que me dijeran qué es lo que más os ha gustado, lo que podría mejorar…y ese tipo de cositas ~
¡Próximamente (o cuando pueda) seguiré con el segundo capítulo!
¡Muchas gracias por visitar mi blog!
Meeru~
► Segundo capítulo (¡en proceso!)